La estancia fue increíble. el lugar tiene un ambiente acogedor y rústico perfecto para relajarse con amigos. La habitación era espaciosa y contaba con vistas impresionantes a la naturaleza circundante. Además, el personal siempre estuvo atento, haciendo que nos sintiéramos como en casa, y el desayuno era realmente abundante y delicioso, ¡definitivamente un gran comienzo para nuestros días!

Lo único que podríamos señalar es que la señal de Wi-Fi a veces era un poco inestable en algunas áreas.

Maravilloso desayuno casero cada mañana.

cerca de atracciones y vistas impresionantes del paisaje

mi estancia fue más que placentera gracias a la cercanía de lugares emblemáticos como la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, a solo 1 km, y el acantilado El Bolao, perfecto para una caminata con vistas al mar, lo que hizo que disfrutar de los alrededores fuera realmente fácil y agradable.

El desayuno es realmente delicioso, especialmente el bizcocho casero que ofrecen cada mañana, fue un verdadero placer comenzar el día con eso.

El único inconveniente fue que el baño estaba en otro piso, lo cual resultaba un poco incómodo, especialmente durante la noche.

a. Ambiente encantador
b. Desayuno delicioso
c. Personal atento

a. Colchón incómodo
b. Falta de aire acondicionado

Desayunos para recordar

Desperté cada mañana con el aroma de la repostería casera. La atención del personal fue excepcional, especialmente Carmen, quien nos hizo sentir como en casa.

Dicho esto, el baño estaba en otro piso, lo que resultaba un poco incómodo durante la noche. Además, me gustaría que ofrecieran cenas.

Instalaciones fenomenales, entorno espectacular, bañera de hidromasaje.

Las escaleras son un problema si tienes movilidad reducida!!! El baño en planta baja y el dormitorio arriba resultan incómodos por la noche!!! Deberían considerar la instalación de aire acondicionado.

La Posada La Villanita es un verdadero refugio de paz, con un desayuno que podría rivalizar con un festival de repostería, panes recién horneados y bizcochos que apenas resistían la tentación de desaparecer. La habitación con una bañera de hidromasaje era tan cómoda que se sentía como un abrazo de un oso de peluche gigante. Ah, y los paseos en bicicleta por los alrededores fueron más emocionantes que una película de acción.

Baño en otro piso

La posada es un lugar encantador, perfecto para nuestra familia de cuatro, con dos niños pequeños. Carmen fue increíblemente atenta, nos ayudó a planear nuestras visitas. Disfrutamos del desayuno delicioso, especialmente el bizcocho casero, y la ubicación es ideal para explorar la zona.

Según mi mujer, sería ideal ofrecer cenas para mayor comodidad y evitar salir a buscar restaurantes después de un largo día.

Habitación súper limpia y acogedora, desayuno delicioso. Carmen, la anfitriona, una berraca, siempre atenta. Aunque el baño estaba en otro piso y el colchón un poco duro, pasamos un buen rato. Ideal para desconectar y disfrutar de la tranquilidad del lugar.

Me alojé en la Suite con bañera hidromasaje y la verdad es que fue genial. La habitación era amplia y acogedora, con todo muy limpio. La bañera fue un lujo total, aunque había que tener cuidado al levantarse por el techo inclinado. Las vistas eran preciosas y el desayuno estuvo increíble, con bizcocho casero. Lo único a mejorar es que hacía un poco de calor y no había aire acondicionado, así que en la noche tuvimos que abrir las ventanas. Pero en general, fue una estancia muy placentera y volvería sin dudarlo.

El desayuno muy rico con tostadas y bizcocho, un buen comienzo del día. La única pega es que el baño está en otro piso y resulta incómodo. Ideal para descansar después de un día de playa.

Una selección óptima para una estancia temporal en Novales con una excelente relación calidad-precio. La cocina es bastante buena y el personal muy atento, lo que hizo que nos sintiéramos cómodos. Si necesitas desconectar, este lugar es perfecto.

Estuvimos un par de noches y la pasamos genial. Habitación amplia y cómoda, excelente atención de todo el personal. Desayuno sabroso, aunque el baño estaba en otro piso y eso complicaba un poco a la noche. Volveríamos sin dudarlo.

La posada tiene un encanto especial, especialmente la suite con hidromasaje. Las habitaciones son cómodas y el desayuno es bueno. Sin embargo, tuvimos un mal comienzo con la recepción que afectó nuestra llegada, además se podría mejorar la variedad del desayuno.